Cada equipo tiene una serie de “guardados”, jugadores que podrían entrar en cualquier momento y definir los partidos. Aquí, una breve lista de los guardados que tienen las cuatro selecciones semifinalistas.

Ibrahim Afellay.- Aunque ha sido poco usado por el DT holandés, Afellay es una carta muy versátil, pues puede jugar como extremo o como medio campo. Actualmente juega en PSV Eindhoven aunque se dice que podría ser trasladado al Hamburgo.

Eljero Elia.- Siempre que ha entrado en este Mundial, ha logrado darle velocidad y profundidad al equipo holandés. El actual delantero del Hamburger SV le gusta jugar a banda cambiada, es decir, como extremo izquierdo y colocarse mejor para su derecha. Tiene velocidad y técnica impecable.

Sebastián Abreu.- Con la obligada ausencia de Luis Suárez, por tarjeta roja, la oportunidad de Abreu de ingresar en el partido contra Holanda es mayor. El famoso “loco” del fútbol uruguayo hizo honor a su apodo metiendo un gol bombeadito en el último penal, con el que Uruguay pasó a la Semifinal. Lo más notable de Abreu es su empuje, su garra, su liderazgo, algo que siempre motiva a Uruguay.

Marko Marin.- Al jugador del Werder Bremen, extremos zurdo, se le consideraba el jugador alemán sorpresa de este Mundial, antes de que apareciera Muller. Nacido en Bosina, su velocidad, su capacidad de ataque y su profundidad es espectacular en la Bundesliga. No se entiende bien por qué Low lo ha descartado sistemáticamente, aunque entró en algunos minutos finales. 

Fernando Llorente.- Tiene 1.96 de estatura y se considera un arma estupenda para el juego aéreo. Sin embargo, no solo para eso. Es un hecho que cuando ingresó contra Portugal cambió completamente el juego, inquietó a la defensa e impidió que los centrales saliesen libremente, como con Torres. El delantero del Atlético Bilbao, además de ser muy carismático, ha dado muestras de saber salvar a sus equipos con su capacidad de ataque. Puede ser un buen cambio de Del Bosque si se decide a olvidar al deficiente Torres. Lo pide toda España.

Pedrito.- Los pocos minutos que ingresó Pedrito en el partido contra Paraguay demostró por qué muchos lo consideraban la revelación del Mundial. A su agilidad mental, su técnica para el regate (un jugador enano, al estilo argentino) y su capacidad de gol (no probada en este Mundial aun) se le suma el hecho innegable de que entiende perfectamente el juego de algunos de sus compañeros en el Barcelona, como Xabi o Iniesta. Jugar de memoria es fundamental para que un equipo funcione como colectivo y posiblemente España lo necesite con urgencia para superar a Alemania.

IT